Nació en 1898 en  Lublin, Polonia, sus padres fueron David  y Leoní , una familia judía asimilada,  acomodada y culta  de la ciudad.  Tenía solo una hermana mayor que ella, Cesia.
   
 Hizo su bachillerato en el Gimnasium de  Lublin , destacándose desde pequeña en  la asignatura de música. , dando conciertos desde que tenia 12 años, destacando su talento para el violín, como les ocurría a muchos judíos.

Al finalizar el colegio consigue una beca para el prestigioso Conservatorio de música de Viena, donde estudiara la carrera de violín con el prestigioso profesor judío Rosé,  director de la Filarmónica de Viena. Fue Rosa, una alumna destacada, como podemos comprobar por sus notas, colgadas  en esta WEB, así como podemos ver también algunos de los conciertos que dio, y su repertorio.

En 1920 se caso con Esteban Tobias en Viena, donde estudiaban ambos.  En 1924 nació su única hija, Ruth, mi madre.
En 1925 se traslada a vivir a Madrid, España, con su marido.
Estuvo dando conciertos de Cámara invitada por la colonia alemana de Madrid, pues era el ambiente más afín a su formación en Viena, con un repertorio que incluía a Malhler, Beethoven, Bach, Wieniawski, Shubert ¡que gran repertorio , y que difícil ¡

 Con el ascenso del nazismo en el año 1933, la colonia alemana dejo de invitarla a los conciertos y le retiraron el saludo.

 Mi abuela todos los días practicaba el violín,  costumbre que mantuvo posteriormente, cuando ya no daba conciertos. Yo la recuerdo en mi adolescencia, sus largos dedos y sus bellas manos de artista siempre con el violín.
Entre los violinistas más sobresalientes, la desmesurada presencia de judíos es ineludible. Alfred Brodsky,  Yehudi Menuhin, David Oistrack, Isaac Stern, etc. El violín se dice que es el superior instrumento de música de cámara y el que tiende  a tocar más notas en las orquestas,  y se adapta muy bien al carácter judío,  como queda plasmado en uno de los musicales de más éxito “El violinista sobre el tejado “en donde la imagen del violinista haciendo equilibrios sobre el tejado, mientras mantiene la armonía y el optimismo, es muy representativo del destino del pueblo hebreo, es alegórica. 
Optimismo, belleza y armonía eran los atributos de mi abuela Rosa, que además pintaba muy bien.  Lo que nunca llego a dominar fue el idioma español, pues al igual que mi abuelo, nunca perdieron el acento extranjero, cosa que no pasaba con los otros idiomas que dominaban, como eran el polaco, ruso y alemán.

Durante la Guerra de España,  se fue con mi madre a Polonia y luego a Francia. Cuando finalizó la guerra   y era inminente el comienzo de la II  Guerra Mundial, se vuelve a España, pero antes se bautiza en Paris, el 4 de febrero de 1939 renunciando a su judaísmo, en la Capilla española de París,   como también hace su   marido ,  y para ingresar en la España franquista  necesito del aval del Marques de Ibarra, un importante aristócrata español,  donde  él daba su palabra de la  “adhesión “de Rosa al “ Movimiento  Nacional “ , que era exigido  por una orden ministerial del 11 de mayo de 1939  (que comentaremos más adelante),  por la que la mayoría de los judíos fueron rechazados y condenados a perecer asesinados en los campos de exterminio .